La planta de piña o ananá, además de ser conocida y estimada por sus deliciosos frutos, puede ser una planta ornamental muy decorativa y de fácil cultivo.
La Ananas (o ananá o piña como se llama frecuentemente), de la gran familia de las Bromeliáceas, es una planta perenne originaria de América central que puede cultivarse con discreto éxito en casa sin esperar, sin embargo, que produzca sus deliciosos frutos.
Es una planta arbustiva que no excede de un metro de altura, formada por una roseta de hojas rígidas y arqueadas que se desarrollan formando una espiral a lo largo de un corto tallo. En el centro de la roseta de hojas se forma un tallo que portará la inflorescencia rojo-violeta y, posteriormente, en su país de origen o en cualquier entorno donde las condiciones de clima y suelo lo permitan, el fruto, aunque en un entorno doméstico será muy pequeño. El fruto se parece a una gran piña formado por el engrosamiento del raquis de la inflorescencia y por la fusión de éste con los frutos frescos carnosos de los que quedan al exterior las brácteas.
La piña se cultiva sea para conseguir los frutos que todos conocemos, sea como planta ornamental, o para la producción de algunos tipos de fibras, en todas las regiones tropicales, sobre todo en Costa de Marfil, Costa Rica y Kenia.
Son diferentes las especies de Ananas que pueden cultivarse en un piso y entre las que recordamos:
La Ananas comosus es la especie que se cultiva con objetivos comerciales para sacar el fruto. Puede también cultivarse en un piso. Presenta hojas muy largas que pueden llegar a más de 1,5 m, con los márgenes espinosos.
Existen numerosas variedades que permiten a las plantas distinguirse por el tamaño y forma del fruto; por las hojas más o menos espinosas; por el sabor del fruto; por las hojas más o menos grandes y jaspeadas, etcétera.
La Ananas ananasoides con la variedad enana es muy decorativa porque las hojas son de color verde oscuro y arqueadas y produce frutos no comestibles también de color verde oscuro y coriáceos.
La Ananas bracteatus es una especie de crecimiento muy lento que puede necesitar ocho años para alcanzar un metro de altura. Muy raramente produce flores de color lavanda y frutos de color marrón, comestibles. Existen muchas variedades, entre ellas la variedad Ananas bracteatus striatus con anchas hojas de color verde intenso con los márgenes de color amarillo-crema y con las espinas de color rojizo.
No es una planta de difícil cultivo en el entorno doméstico.
Requiere temperaturas de cultivo no inferiores a 15°C y quiere la luz, mejor si es el sol directo. La escasez de luz hace que las hojas pierdan la característica vena. Si la planta se tiene en un entorno donde las temperaturas se mantienen suaves durante todo el año, la planta crece de manera continua aunque, durante el período invernal, ralentiza su desarrollo.
La Ananans es una planta bastante exigente en agua solicitando riegos constantes durante todo el período primaveral-veraniego pero teniendo cuidado de que el terreno no queda nunca empapado de agua porque no tolera los encharcamientos.
Durante el período otoño-invierno hace falta disminuir los riegos pero sin que falten; de otro modo las hojas perderían su turgencia.
Necesita un entorno húmedo; por lo tanto, durante el período caliente, hace falta pulverizar regularmente las hojas. Para mantener un microclima constantemente húmedo sería oportuno colocar la planta sobre un posamacetas lleno de guijarros y con agua en el fondo, teniendo cuidado de que el fondo de la maceta no esté sumergido, de otro modo el terreno se saturaría en agua haciendo pudrir las raíces. Con el calor, el agua de la maceta se evaporará humedeciendo el aire circundante.
La Ananas es una planta que no tiene raíces muy profundas, por tanto se trasplanta cada dos años. Se usa un sustrato formado por dos partes de terreno fibroso, una parte de turba y una parte de arena. Es importante que la tierra permita un buen drenaje del agua de riego porque no tolera los encharcamientos.
A medida que la planta crece y puesto que pudiera volverse pesada y la maceta podría no darle suficiente sostén, se aconseja poner piedras ordenadas en el fondo de la maceta para recargarla.
La Ananás necesita abonos regulares, cada mes a partir de la primavera y hasta al principio del otoño. Use un buen abono líquido que diluirá en el agua de riego, disminuyendo ligeramente las dosis con respecto a lo indicado en el producto. Durante el período restante del año, abonar cada dos meses.
Es oportuno usar un abono que además de contener los macroelementos como nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), contenga también los microelementos como el hierro (Fe), el manganeso (Mn), el cobre (Cu), el cinc (Zn), el boro (B), el molibdeno (Mo), todos importantes para un correcto crecimiento de la planta.
La piña es una planta que no se poda. Se eliminan sólo las hojas que a medida que la planta crece se secan, para evitar que se conviertan en vehículo de enfermedades parasitarias.
Durante el período veraniego la planta florece y en la parte central de la roseta de hojas se formará un tallo carnoso que llevará en su parte apical la inflorescencia.
La ananás se multiplica por retoños o por manojos de hojas.
MULTIPLICACIÓN POR RETOÑOS
En primavera se pueden retirar los retoños que se forman en la base de la planta madre con todas sus raíces. Cada retoño por lo tanto se coloca en una maceta individual con un sustrato compuesto como se indica en el párrafo «Trasplante» y la joven planta se trata como si fuera adulta. Los retoños florecen después unos dos 2 años.
MULTIPLICACIÓN POR MECHÓN DE HOJAS
De la piña se puede retirar el manojo de hojas y ponerlo a arraigar.
Del fruto de una piña grande, sana y fresca se corta el manojo de hojas apical con un cuchillo afilado. Se eliminan las hojas que se encuentran más abajo y se instala el manojo en un bote de modo que la base roce la superficie del agua. Durante todo el período de enraizamiento hace falta mantener el nivel del agua siempre constante, por tanto debe ser controlado cada día. Después de 1-2 semanas empezarán a brotar las primeras raíces. Espere que alcancen un largo de unos dos centímetros y después trasplántelo a una maceta tal como se indica en el párrafo «Trasplante».
Otro método es, después de haber cortado el mechón de hojas, dejar secar la base durante 5-6 días. Después se deja reposar sobre un sustrato húmedo (no enterrarlo) y se mantiene el terreno constantemente húmedo, situándolo en una zona con temperaturas alrededor de 21-23°C y en un entorno con mucha luz.
No es una planta muy susceptible a enfermedades por lo que si la planta no está hermosa, significa que no la está cuidando como debería. Controle, por lo tanto, que tiene que cultivarse como se describe en la presente ficha cultural y actúe en consecuencia.
La piña fue descubierta en Brasil en el 1555 pero en Europa sólo se inició su cultivo 200 años después.
Es el fruto enlatado más consumido.
En las Filipinas se realiza un tejido de óptima calidad a partir de las fibras de la hoja.
Ves: «Las plantas medicinales: la Ananas».