El pitósporo (como comúnmente es llamado), pertenece al género Pittosporum y a la familia de los Pittosporaceae. Son plantas originarias de Asia, sobre todo de China y Japón, de Australia y también de África, pero están muy extendidas y utilizadas, sobre todo como setos y ribetes, en todo el mundo.
Son plantas siempreverdes, muy rústicas, de porte arbustivo y arbóreo, con la copas compactas y bastante frondosas.
Las hojas son coriáceas, ovaladas o lanceoladas, alternas, brillantes, de un bonito color verde oscuro en el haz que se vuelve más claro en el envés, con venas más o menos evidentes según la variedad o híbrido, con nervadura central incidida.
Las flores pueden ser blanco crema, amarillentas, rojizas, marronáceas o casi negras según la especies y variedad, dispuestas singularmente o asociadas en inflorescencias terminales. En la mayor parte de las especies son perfumadas, emanando un agradable perfume que en algunas especies recuerda a las flores de naranjo. La floración del pitósporo empieza en la primavera avanzada y dura bastantes semanas. Son especies de polinización entomófila.
El fruto es una cápsula que madura a partir del mes de agosto y produce numerosas semillas que quedan inmersas en una sustancia gomoso-resinosa de la que se cubren.
Hay numerosas especies de Pittosporum entre las que recordamos:
El Pittosporum tobira (foto debajo), originario de China y del Japón es una especie de crecimiento reducido, no superando en sus entornos naturales los 5 m de altura, con porte matoso.
Las ramas están muy abiertas y las hojas son de color verde oscuro en el haz y verde más claro en el envés y son brillantes hacia abajo con los bordes ligeramente curvados.
Las flores son muy perfumadas de color blanco crema-amarillento, asociadas en ramilletes terminales y brotan de mayo a julio.
Es una de las especies más extendidas junto al Pittosporum tenuifolium, y normalmente es utilizada para formar setos pero crece muy bien también en maceta.
El Pittosporum tobira también es conocido con el nombre de japanese mock-orangeporque el perfume de sus flores es parecido al de las flores de naranjo.
Muy extendido es el Pittosporum tobira ‘Variegatum’ (foto debajo) con las hojas jaspeadas irregularmente de blanco.
El Pittosporum tenuifolium (foto debajo) conocido también como Pittosporum nigracans es originario de Nueva Zelanda y en sus lugares de origen forma árboles de hasta 9 m de altura.
Junto al Pittosporum tobira es la especie más extendida en los climas mediterráneos donde raramente supera los 2 m de altura.
Tiene un porte muy ramificado y matoso. Las ramas tienen la corteza de un bonito color rojo oscuro con hojas verde-argentadas y brillantes. Las flores son pequeñas, muy perfumadas, de color marrón oscuro y aparecen al final de la primavera. Los frutos maduran a partir del mes de agosto.
Existen numerosas cultivars entre las que recordamos: Pittosporum tenuifolium ‘Purpureum’ con las hojas de color broncíneo que se vuelven de color púrpura en la madurez; Pittosporum tenuifolium ‘Garnettii’ con las hojas gris-verdoso con los márgenes de color blanca crema; Pittosporum tenuifolium ‘Silver Queen’ con las hojas jaspeadas de plata; Pittosporum tenuifolium ‘Variegatum’ con las hojas agudas de color verde claro con los márgenes blanquecinos.
El Pittosporum crassifolium (foto debajo) es una especie arbustiva originaria de Nueva Zelanda. Florece en primavera con flores de color rojo oscuro - marronáceas asociadas en inflorescencias terminales. Es una especie muy rústica, muy resistente a los entornos salinos, por lo que puede ser cultivada con éxito a lo largo de las costas.
Las ramas van revestidas por una ligera pelusa blanquecina igual que el envés de las hojas.
Su madera es muy dura y es utilizado para hacer taraceado. Se presta muy bien a la poda. Esta planta es muy rica en saponina.
El Pittosporum eugenioides (foto debajo) es una especie arbustiva que se desarrolla hasta 10 m de altura con hojas alternas, coriáceas, brillantes y con los márgenes ondulados. Si se cortan, emanan un agradable perfume a limón.
Las flores son amarillo claro y muy perfumadas y se presentan agrupadas en inflorescencias terminales en umbela muy utilizadas para la composición de los pots pourris.
De esta planta se consigue una resina utilizada para hacer los chicles. Además, de la resina se consigue un aceite para cabello y colutorios para tratar la halitosis.
Las plantas de Pittosporum no son de difícil cultivo y forman excelentes setos, de rápido crecimiento y muy decorativos.
Fundamentalmente son plantas para exteriores pero también pueden crecer en casa.
Al exterior posicione el pitósporo en una posición protegida, por ejemplo delante de un muro, de modo que quede abrigado y no sometido a corrientes frías o viento.
Puede ser posicionada también a plena luz al sol directo.
Las temperaturas mínimas de cultivo son variables. Por ejemplo las plantas de Pittosporum tenuifolium y Pittosporum tobira (las más extendidas), resisten temperaturas mínimas invernales alrededor de los 0 °C.
Para las plantas cultivadas dentro de casa, hace falta tener presente que quieren el aire, por lo que es importante que siempre haya una buena reposición de aire teniendo cuidado con las corrientes de aire frío que en ningún modo agradecen y con la llegada del buen tiempo, es preferible llevarlas al exterior.
Desde la primavera y durante todo el verano la planta de Pittosporum debe ser regada abundantemente, esperando a que el sustrato se seque entre un riego y otro y sin dejar encharcamientos en el posamacetas o en el terreno.
Durante el invierno se riega con mucha más moderación.
Cuando la reguemos, recordemos que es una planta que tolera mejor la sequía que no los riegos excesivos.
Si el aire está demasiado seco durante la estación veraniega puede pulverizar la copa y disponer la planta sobre un posamacetas lleno de guijarros y luego llenarlo de agua teniendo cuidado de que el fondo de la maceta no esté sumergido en el agua porque de ese modo el terreno se saturaría de agua haciendo pudrir las raíces. Este sistema permite, cuando hace calor, hacer evaporarse el agua del posamacetas, lo que por consiguiente humedece el aire circundante. Acordarse de rellenar cada vez que el agua del posamacetas se haya evaporado.
Si la planta de Pittosporo es cultivada al exterior, en el momento de la disposición, tenga cuidado de no ponerla en correspondencia con depresiones del terreno donde pudiera acumularse el agua pluvial o el agua de riego.
La planta de Pittosporum se trasplanta prácticamente cada año, en abril y hasta que la maceta haya alcanzado la dimensión de 50-60 cm. Más allá de eso, cada año se extrae la capa superficial del terreno en unos 5 cm y se sustituye con sustrato fresco.
No es particularmente exigente en terreno. La característica que tiene que tener es la posibilidad de permitir un escurrido rápido de aguas en exceso y ser tendencialmente alcalino, no quiere en efecto los suelos ácidos. Mezclar al sustrato vermiculita o perlita o arena gruesa que volverán la tierra más blanda y principalmente más drenante.
Tenga cuidado de colocar sobre el fondo de la maceta trozos de barro cocido para favorecer el escurrido rápido de agua en exceso ya que no toleran los encharcamientos.
Siempre recomiendo usar terracota porque, al ser porosa, permite a la tierra respirar y corrige eventuales excesos de riego (permite evaporar el agua).
Desde la primavera y durante todo el verano, abonar la planta cada 3-4 semanas con un abono líquido, a diluir en el agua de riego o bien cada semana pero demediando las dosis con respecto a lo indicado en el producto.
Use un buen abono que no sólo contenga nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), sino también los llamados microelementos, igualmente importantes para el crecimiento de la planta, es decir, el hierro (Fe), el manganeso (Mn), el cobre (Cu), el cinc (Zn), el boro (B), el molibdeno (Mo).
La planta de pitosporo inicia a florecer en la primavera avanzada y continúa durante todo el verano.
La planta de Pittosporum es una planta que se presta bien a ser podada sobre todo para darle una forma armónica reduciendo los brotes demasiado largos y esparcidos y las ramas demasiado finas.
La poda se realiza en abril - mayo.
Tenga cuidado de que el utensilio que use para el corte esté limpio y desinfectado, preferiblemente a la llama, para evitar infectar los tejidos.
La planta de pitósporo se multiplica por esqueje o por semilla.
Al elegir la técnica a adoptar se debe tener presente que la multiplicación por semilla tiene la desventaja de que no se conseguirán, casi con toda seguridad, plantas iguales a la planta madre al intervenir la variabilidad genética. En consecuencia, si quiere conseguir un ejemplar preciso, es mejor hacer la multiplicación por esqueje.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
El esqueje puede ser retirado de los tallos de verano.
Los esquejes tienen que ser de 8-10 cm de largo y deben ser cortados justo bajo una hoja y deben ser eliminadas las hojas más bajas. Además elíjalo de plantas robustas y en buena salud. Se recomienda cortar en sentido oblicuo porque eso permite tener una mayor superficie de enraizamiento y evita la acumulación de agua sobre esta superficie.
Utilice un cuchillo afilado para evitar que se deshilache el tejido, limpiar y desinfectar, de preferencia a la llama o con alcohol o lejía, para evitar infectar los tejidos y desinféctelo en cada corte.
Espolvorear la parte cortada con un polvo para favorecer el enraizamiento y añadir un fungicida de amplio espectro para prevenir los ataques de hongos.
En este punto, colocar los esquejes en el suelo formado a partes iguales de turba y arena gruesa con un agujero hecho con un lápiz y plantarlos a una profundidad de alrededor de 1,5-2 cm.
Revestir la maceta con una hoja de plástico transparente o una bolsita puesta a modo de capucha y colóquelo a la sombra y a una temperatura alrededor de 18°C. El sustrato siempre debe estar ligeramente húmedo regando sin mojar el esqueje con agua no calcárea y a temperatura ambiente. Cada día se aparta el plástico para controlar la humedad del terreno y eliminar del plástico el agua de condensación que indudablemente se habrá formado.
Cuando los primeros brotes empiezan a aparecer (generalmente después de un mes, mes y medio) significa que en los esquejes se han formado las raíces. Es momento de quitar el plástico y poner a una luz más positiva (no sol directo) y se espera a que los esquejes se robustezcan. Cuando sean suficientemente grandes, se establecerán en la maceta definitiva de cerca de 10 cm de diámetro y se tratarán como plantas adultas. Es preferible que las plantas jóvenes, si tienen que ser trasplantadas al exterior, pasen el invierno en entorno protegido y se trasplanten en primavera.
MULTIPLICACIÓN POR SEMILLAS
Las semillas deben ser plantadas en marzo en un compost formado por una parte de sustrato fértil y una de arena gruesa o perlita o vemiculita. Las semillas, antes de ser utilizadas deben ser limpiadas bien de la sustancia resinosa que las circunda.
La bandeja que contiene las semillas debe ser mantenida a la luz y en un lugar caliente. Es fundamental que el sustrato esté constantemente húmedo (usar un rociador para humedecer totalmente el sustrato), hasta el momento de la germinación.
La bandeja se cubre con una hoja de plástico transparente (o cristal) para asegurar una buena temperatura y evitar que el suelo se seque demasiado rápidamente. La hoja de plástico debe ser retirada cada día para controlar el grado de humedad del terreno y sacar el agua de condensación.
Cuando las semillas hayan germinado se aparta la lámina de plástico y se desplaza la caja a una posición más luminosa (no luz directa del sol).
Cuando las jóvenes plantas sean lo suficientemente grandes para ser manipuladas se establecen en potes individuales.
Si tienen que ser trasplantadas al exterior, espere a la primavera siguiente y haga pasar la planta el primer invierno en entorno protegido.
Las plantas no son plantas particularmente sometidas a enfermedades. En todo caso las patologías que puede hallar son las siguientes:
Si nota este síntoma quiere decir que hay una falta de agua.
Remedio: regule mejor los riegos.
Las manchas sobre el envés de las hojas podrían significar la presencia de la cochinilla algodonosa. Para estar seguros, sugerimos utilizar una lupa y compararlas con la foto de al lado. Se caracterizan por tener una especie de escudo protector, de color blanco algodonoso. Además si intenta sacarlas con una uña, salen fuera fácilmente.
Remedio: sacarlas con un copo de algodón mojado en alcohol o si la planta es grande y en maceta, se puede lavar con agua y jabón neutro frotando muy delicadamente con una esponja para retirar los parásitos. Después, la planta debe aclararse muy bien para eliminar todo el jabón. Para las plantas más grandes y plantadas al exterior, puede usar productos químicos específicos. Los tratamientos con insecticidas anticochinillas, para que sean más eficaces, deben ir dirigidos contra las larvas, que son más sensibles que el adulto.
Si las hojas inician a amarillear y después de estas manifestaciones se abarquillan y asumen un aspecto casi polvoriento y caen, muy probablemente estamos en presencia de un ataque de ácaros o araña roja o arañuela, un ácaro muy molesto y dañino. Observándolas cuidadosamente se notan también sutiles telarañas sobre todo en el envés de las hojas.
Remedio: mantener un entorno muy húmedo alrededor de la planta porque la falta de humedad favorece su desarrollo y eventualmente, sólo en el caso de infestaciones particularmente graves, usar productos químicos específicos.
Los áfidos más frecuentemente llamados pulgones, son insectos que si no se mantuvieran bajo control pueden provocar graves daños a la planta. Pueden ser de diferentes colores dependiendo de la especie, pero casi siempre de amarillo a verde o a blanco.
Remedio: tratar con productos específicos contra áfidos localizables en las tiendas especializadas en jardinería.
El nombre pittosporum deriva del griego pitta «pez» y sporos «semilla» que significa «semillas a revestimiento resinoso» para aludir al hecho de que las semillas de este género van revestidas por una sustancia pegajosa parecida a la resina.
