La Hardenbergia con su porte trepador es una cobertura excelente de cercas, glorietas y muros.
El género Hardenbergia de la familia Fabaceae (ex Leguminosae), comprende muchas especies originarias de Australia donde vive en hábitats muy diferentes: desde la costa a las montañas, de la selva al bosque y a veces también en los páramos.
Se trata de plantas siempreverdes, trepadoras, que pueden superar los tres metros de altura, con un tallo leñoso que tiende a enredarse alrededor del tallo de otras plantas. Las hojas son de color verde oscuro, coriáceo, con evidentes vetas, abundantes y ovaladas. Las flores, asociadas en inflorescencias en racimo o en espiga, brotan al principio de la primavera y pueden ser irregularmente coloreadas según la especie y la variedad. Los frutos son vainas.
Sólo existen tres especies en el género Hardenbergia entre las que recordamos:
La Hardenbergia violacea presenta las características típicas del género con porte trepador, tallo leñoso que se envuelve alrededor de los tallos de las otras plantas aunque no se considera invasora.
Tiene hojas enteras, lanceoladas, de color verde oscuro, brillantes y con vetas evidentes, de 75-100 mm de largas. Las flores de un bonito color morado (aunque existen variedades que producen flores de color rosa o blanco) asociadas en inflorescencias en racimo muy largas, con unas treinta flores por racimo. Florece al final del invierno-principio de la primavera.
Su nombre común es hardenbergia violeta.
La Hardenbergia comptoniana es una especie perenne de enredadera que produce flores de color azul-morado con el centro de la flor de color verde. Florece al principio de la primavera.
La Hardenbergia es una planta muy fácil de cultivar que no solicita cuidados particulares.
Es particularmente robusta, trepadora y forma una gran mata muy ramificada que puede cultivarse en maceta o en plena tierra en este último caso, si las condiciones climáticas lo permiten ya que de hecho teme el frío y quiere exposiciones soleadas por tanto, allá donde las temperaturas invernales bajen sensiblemente, necesariamente hay que cultivar la planta en maceta para protegerla durante la estación fría.
La Hardenbergia tiene necesidad de soportes para su crecimiento y son muy aptas para adornar cercas y glorietas.
La Hardenbergia debe regarse frecuentemente durante el período primavera-verano pero es preferible esperar que el terreno se seque en superficie antes de proceder con los siguientes riegos. En los demás períodos los riegos se reducen sensiblemente.
La Hardenbergia se trasplanta cada 2 años utilizando una maceta de dimensiones ligeramente mayores que la precedente. Para el trasplante utilice una mezcla formada por mantillo de jardín, turba y arena (para favorecer el drenaje del agua de riego porque las Hardenbergia no soportan los encharcamientos), todo a partes iguales.
Siempre recomiendo usar terracota porque, al ser porosa, permite a la tierra respirar y corrige eventuales excesos de riego (permite evaporar el agua).
Desde el principio de la primavera y todo el verano la Hardenbergia se abona una vez cada 2/3 semanas diluyendo el fertilizante en el agua de riego y demediando las dosis con respecto de lo indicado en las instrucciones del fertilizante. En los demás períodos los abonos deben suspenderse.
En lo que concierne al tipo de abono a suministrar, existen a la venta muchos tipos pero es buena norma leer la etiqueta que indica la composición y suministrar un abono que además de contener macroelementos: nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), contenga también microelementos como el magnesio (Mg), el hierro (Fe), el manganeso (Mn), el cobre (Cu), el cinc (Zn), el boro (B), el molibdeno (Mo), todos importantes para el crecimiento de la planta.
Hace falta podar regularmente después de la floración porque tiende a desvestirse en su base. Con la poda la planta se fortalece y emite nuevos brotes.
Acordarse, cuando se realizan operaciones de corte sobre una planta, de limpiar y desinfectar, preferiblemente a la llama, los utensilios a usar para evitar que se conviertan en vehículo de enfermedades parasitarias.
La época de la floración de la Hardenbergia es el principio de la primavera. Las flores se reúnen en inflorescencias en racimo o espiga y son generalmente de color morado, lila, blanco o rosa según la especie y la variedad.
La multiplicación ocurre por esqueje de tallo o por semilla.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
En verano avanzado se retiran esquejes de 10-15 cm de largo cortados justo bajo un nudo de modo que queden algunas hojas. Se recomienda cortar en sentido oblicuo lo que permite tener una mayor superficie de enraizamiento y evita la acumulación de agua sobre la superficie de corte.
Utilice un cuchillo afilado para evitar que se deshilache el tejido, limpio y desinfectado (de preferencia a la llama o con alcohol o lejía) para evitar infectar los tejidos y desinféctelo en cada corte.
Después de haber eliminado las hojas más bajas a continuación se colocan los esquejes en un compost formado por turba y arena gruesa haciendo agujeros con un lápiz, tantos como esquejes a plantar, teniendo a continuación cuidado de compactar delicadamente el sustrato.
La caja o la maceta se cubre con una hoja de plástico transparente o una bolsita puesta a modo de capucha después de haber colocado en el terreno palitos para mantener el plástico alejado de los esquejes y haber apretado la bolsita a la maceta con un elástico para evitar la pérdida de humedad. La maceta se instala en una zona de la casa ligeramente sombreada. Cada día se aparta el plástico para controlar la humedad del terreno y eliminar del plástico el agua de condensación que indudablemente se habrá formado.Cuando empiecen a aparecer los primeros brotes quiere decir que el esqueje ha arraigado. Es momento de quitar el plástico y poner a una luz más positiva (no sol directo), a la misma temperatura y se espera a que los esquejes se robustezcan. Cuando sean suficientemente grandes, se establecerán en la maceta definitiva y se tratarán como plantas adultas.
MULTIPLICACIÓN POR SEMILLAS
En caso de que se quiera realizar la multiplicación por semilla hace falta efectuar, antes de la siembra, la "sajadura" es decir volver la capa externa de los tegumentos de la semilla permeable al agua y a los gases. Para hacer esto puede adoptar varias técnicas: sumergir las semillas en agua hirviendo y dejarlas en remojo hasta que el agua se haya enfriado; o bien se puede "arañar" la superficie de la semilla con papel de lija de grano fino o bien incidir la capa externa con un cuchillo (sólo los más expertos) teniendo cuidado con no dañar "el ojo", es decir la pequeña depresión que se nota en la semilla.
No son plantas particularmente sometidas a enfermedades, ocasionalmente pueden padecer:
Los áfidos, más frecuentemente llamados pulgones, son insectos que si no tuvieran control pueden provocar graves daños a la planta. Obsérvelos con una lupa y compare con la foto de al lado, son inconfundibles, no puede equivocarse.
Remedio: tratar con productos específicos contra los áfidos localizables en tiendas especializadas en jardinería.
Posteriormente a estas manifestaciones las hojas se abarquillan, asumen un aspecto casi polvoriento y caen. Observando cuidadosamente se notan también sutiles telarañas sobre todo en el envés de las hojas. Con estos síntomas muy probablemente estamos en presencia de un ataque de ácaros o araña roja o arañuela un ácaro muy molesto y dañino.
Usar productos químicos específicos.
En su país de origen la planta es conocida con el nombre común de falsa zarzaparrilla (porque se parece a la planta comúnmente conocida como zarzaparrilla que no es otra sino la Smilax aspera).
Es una planta utilizada sobre todo para la decoración vial en los Estados Unidos donde comúnmente es llamada vine lilac o purple coral pea, happy wanderer, native lilac and waraburra.
El nombre del género Hardenbergia se le dedicó a la condesa Franziska von Hardenberg hermana del barón Carl Hugel (1795 -1870) oficial del ejército austríaco, diplomático, botánico y explorador.