El género Gynura de la familia Asteraceae incluye plantas siempreverdes, originarias de zonas tropicales de África y Asia, muy extendidas y cultivadas para adornar las casas por ser muy decorativas y fáciles de cultivar.
Son plantas caracterizadas por hojas aterciopeladas revestidas por una ligera pelusa rojiza que en contraste con el color verde de las hojas da a la hoja un color violeta. Según la especie pueden tener porte erguido o colgante y por lo tanto son aptas para ser cultivadas en cestos suspendidos o como trepadoras.
Producen pequeñas flores anaranjadas o amarillas muy poco decorativas y no de olor agradable, asociadas en inflorescencias en el ápice de las ramas.
En el género Gynura hay unas cincuenta especies pero las utilizadas principalmente con objetivos ornamentales son las siguientes:
La Gynura aurantiaca es una planta originaria de la India y África occidental y está caracterizada por largos tallos rastreros que le otorgan un porte expandido. Las hojas son carnosas con los márgenes levemente dentados, de color verde intenso y toda la planta está revestida por una pelusa rojiza.
Florece al principio de la primavera produciendo numerosas flores parecidas a las margaritas pero que se aconseja eliminar por ser poco llamativas y que, en cambio, harían deteriorarse a la planta otorgándole un aspecto demasiado desaliñado.
Puede ser cultivada como planta trepadora o en cestos suspendidos.
Muy extendido es el cultivar G. aurantiaca ‘Purple Passion’ (sinónimo de la G. sarmetosa), trepador o rastrero con tallos de color rojo revestidos por pelusa y hojas lanceoladas densamente cubiertas con pelos de color rojo púrpura en el envés, más ligeramente en el haz.
La Gynura bicolor es originaria de Indonesia. Las hojas son lanceoladas de color verde en el haz de la hoja y rojo en el envés. Las flores son de color anaranjado.
La planta es muy popular en la cocina vegetariana de Taiwán. Se usan las hojas tiernas y los brotes, consumidos hervidos o salteados en sartén o agregados a los estofados y a las sopas. Igualmente las raíces son usadas hervidas para hacer té.
Las Gynura son plantas muy fáciles de cultivar.
Es una planta que quiere la luz pero hay que evitar sobre todo la exposición a la luz directa del sol en las horas más calientes del día.
Las temperaturas ideales de cultivo están alrededor de los 18-21°C y no tienen que bajar de los 10°C.
Al cultivar la planta hace falta tener presente que durante el período otoño - invierno la planta entra en descanso vegetativo por lo que todas las actividades se suspenden.
Las Gynura son plantas que solicitan mucha agua; por tanto durante el período veraniego debe ser regada con gran generosidad mientras durante el otoño y el invierno se riega justo lo necesario para no dejar secar el sustrato.
Quieren entornos húmedos, por lo tanto es oportuno pulverizar las hojas, preferiblemente pronto por la mañana, porque si se espera a que el sol se haga demasiado cálido se podrían formar pequeñas vejigas oscuras.
La Gynura se trasplanta cada dos años en primavera usando un sustrato formado por tierra fértil, turba, sustrato de hojas bien descompuestas y arena gruesa para favorecer el drenaje del agua de riego.
Durante todo el período primavera - verano se suministra al agua de riego de la planta un buen abono líquido cada 3-4 semanas. Durante los demás períodos del año los abonos deben ser suspendidos.
Al principio de la primavera la planta florece produciendo pequeñas flores de color amarillo-anaranjado y completamente insignificantes que se aconseja sacar en cuanto se forman para no hacer desperdiciar energías inútiles a la planta o porque tienen un olor poco agradable.
La poda de la Gynura se hace necesaria cuando la planta crece de manera desordenada. En este caso en primavera, antes de la reanudación vegetativa, conviene darle una forma más compacta con una buena poda.
La multiplicación ocurre por esqueje.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
En primavera se retiran esquejes de unos 8-12 cm de largo del ápice de los tallos más robustos.
El esqueje se corta justo bajo un nudo y se eliminan las hojas más bajas.
El corte debe hacerse con una hoja de afeitar o con un cuchillo afilado para evitar deshilachar los tejidos y después de haberlo limpiado y desinfectado bien, preferiblemente a la llama, para evitar que puedan de infectar los tejidos.
Los esquejes listos se plantan en una mezcla de turba y arena a partes iguales y se cierra todo con una hoja de plástico transparente (ver foto al lado).
Esto permite al terreno no secarse demasiado rápidamente y al mismo tiempo mantener una temperatura constante. Para evitar que el plástico entre en contacto con las partes verdes del esqueje, situar palitos de madera donde apoyar el plástico.
Coloque la maceta en una zona de la casa donde las temperaturas estén alrededor de 18-21°C. Cada día sacar el plástico para controlar la humedad del terreno (tiene que estar siempre húmedo), y para sacar el agua de condensación que indudablemente se habrá formado sobre el plástico.
Cuando los primeros brotes empiezan a aparecer significa que en los cortes se han formado las raíces. Es momento de quitar el plástico y poner a una luz más positiva (no sol directo), a la misma temperatura y se espera a que los esquejes se robustezcan. Cuando sean lo suficientemente grandes, se establecerán en la maceta definitiva y se tratarán como plantas adultas.
Este síntoma indica que se ha dejado la planta sin agua.
Remedio: proveer por consiguiente.
Este síntoma es índice de una iluminación insuficiente.
Remedio: desplazar enseguida la planta a un lugar más luminoso pero no al sol directo.
Pequeños insectos móviles de color variable del blanco al amarillo o al verde son indudablemente áfidos más a menudo llamados pulgones. Son insectos que si no se mantuvieran bajo control pueden provocar graves daños a la planta.
Remedio: tratar con pesticidas específicos que pueden encontrarse fácilmente en un vivero.
El nombre Gynura deriva del griego ghynè «hembra» y ourà «cola» por los estigmas muy alargados.
