El género Lampranthus, de la familia Aizoaceae , es originario de las regiones áridas del sur de África y comprende plantas siempreverdes, que forman alfombras herbosas muy espesas o auténticas matas, caracterizadas por flores muy llamativas y coloreadas.
Es un género relativamente reciente, derivado de la subdivisión del género Mesembrianthemum, tanto que algunas especies todavía son conocidas con su viejo nombre.
Las Lampranthus son plantas suculentas, muy extendidas en todas las zonas de clima árido, siempreverdes, muy rústicas, de porte rastrero o matoso.
Las hojas son carnosas, de sección triangular, cilíndrica o semicilíndrica según la especie.
Las flores, que se forman en el ápice de los tallos florales son hermafroditas, con un cáliz formado por cinco sépalos y una corola rica en pétalos, grandes, muy coloreados (amarillas, escarlatas, magentas, rojas, rosas o anaranjadas según la especie y la variedad), sólo se abren cuando están a pleno sol.
Existen cerca de un centenar de especie de Lampranthus entre las que recordamos:
La Lampranthus aurantiacus (foto debajo) tiene porte arbustivo y alcanza una altura máxima de 50 cm formando pequeñas matas no particularmente densas.
Las hojas son de sección semicilíndrica y las flores son de color anaranjado, de unos 5 cm de ancho, y florece hacia el fin del verano y hasta el otoño.
Las Lampranthus coccineus (foto debajo) son plantas que pueden alcanzar 40 cm de altura con hojas de sección triangular y flores de color carmín.
La Lampranthus roseus (foto debajo) es una planta caracterizada por hojas de sección cilíndrica con flores de color rosa.
La Lampranthus spectabilis (foto debajo) es una planta que presenta flores de color púrpura con las hojas ahusadas.
La Lampranthus conspicuus es una enredadera muy desarrollada que alcanza una altura de 30 cm con las hojas brillantes, de sección semicilíndrica, de un bonito color verse encendido. Las flores son de color rojo intenso, producidas en gran número a partir del fin del verano.
La Lampranthus amoenus se caracteriza por hojas de sección cilíndrica que tienen la particularidad de convertirse en rojas cuando se exponen a pleno sol. Las flores son de color rojo púrpura, grandes y aparecen a partir del fin del verano. Es una planta que no alcanza grandes dimensiones no superando 25 cm de altura.
La Lampranthus es una planta muy fácil de cultivar que no solicita particulares cuidados. Las temperaturas ideales de cultivo están alrededor de 15-18°C pero viven bien también a temperaturas más elevadas. Viceversa, son plantas sensibles al frío, por tanto es importante que las temperaturas mínimas no bajen de 5-6°C.
Quiere la luz y el sol, por tanto expóngala sin problemas a pleno sol (atención, no detrás de un vidrio, porque se crearía efecto lente y los rayos estarían demasiado concentrados) y mantenga el entorno bien aireado porque no agradecen los entornos húmedos.
Las Lampranthus deben regarse con mucha parquedad a partir de la primavera y durante todo el verano y antes de regar hace falta que el sustrato en superficie se haya secado. Durante el otoño y el invierno, en consideración al hecho de que la planta entra en descanso vegetativo, los riegos tienen prácticamente que suspenderse. Justo de vez en cuando alguna gota, no más.
El trasplante se realiza al principio de la primavera usando macetas de dimensiones poco a poco algo más grandes que la precedente hasta llegar a la medida de unos 18-20 cm. Después sólo se extrae la capa superficial del terreno de unos 2,5-5 cm reemplazándola con tierra fresca.
Se usa un sustrato para cactáceas o bien puede preparar un terreno formado por una parte de arcilla, tres partes de arena y una de turba.
Igual que los riegos, también los abonados tienen que ser moderados: cada 3 semanas mezclando al agua de riego un buen fertilizante líquido diluido y disminuyendo las dosis con respecto a lo indicado en el fertilizante.
Use un fertilizante que además de contener nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K) también contenga microelementos como el magnesio (Mg), el hierro (Fe), el manganeso (Mn), ), el cobre (Cu), el cinc (Zn), el boro (B), el molibdeno (Mo), ), todos importantes para la planta.
Florece en pleno verano y hasta el otoño y cada flor dura alrededor de una semana. Cuando se mustien las flores deben ser retiradas con rapidez.
La planta de Lampranthus de hecho no se poda. Sólo en el momento del trasplante es oportuno podar las ramas crecidas excesivamente para contener la planta y darle una forma más airosa.
La propagación de las plantas ocurre por semilla o por esqueje.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
Se corta una rama lateral de Lampranthus de 8-10 cm de largo al principio de la primavera (entre marzo y mayo) y se deja secar unos 3 días; después se espolvorea el corte con un polvo que favorezca la emisión de raíces y se planta en una caja o en una maceta donde habrá puesto tierra para cactáceas mezclada con un poco de arena gruesa.
Sitúe la maceta en una zona lejos de la luz directa del sol, con una temperatura alrededor de 18°C y riegue el terreno de modo que quede ligeramente húmedo. Cuando empiecen a aparecer los primeros brotes quiere decir que el esqueje ha formado ya el aparato radical. Entonces las plantas individuales pueden ser retiradas muy delicadamente y plantadas cada una en una maceta individual como si fuera una planta adulta y tiene que tratarse como tal.
MULTIPLICACIÓN POR SEMILLA
Se adopta esta técnica en el caso de que se quiera realizar una especie de prado. Las semillas se plantan en primavera, cuando el tiempo ya es estable y no hay más riesgo de cambios bruscos de temperatura.
No es una planta sometida a enfermedades. La única atención para no hacer aparecer patologías es regular los riegos que tienen que ser muy moderados. El único parásito que puede dar problemas a esta planta es la cochinilla algodonosa.
Podrían significar que está en presencia de cochinilla y en particular de la cochinilla algodonosa o cotonet. Para estar seguros, sugerimos utilizar una lupa y observar. Se caracterizan por tener una especie de escudo protector, de color blanco. Compárelas con la foto debajo, son características, no puede equivocarse. Además si intenta sacarlas con una uña, vienen fuera fácilmente.
Remedio: retírelas con un copo de algodón mojado en alcohol o si la planta es grande y en maceta, puede lavarla con agua y jabón neutro frotando muy delicadamente con una esponja para retirar los parásitos. Después la planta debe ser aclarada muy bien para eliminar todo el jabón. Para las plantas más grandes y plantadas al exterior, puede usar productos químicos específicos. Los tratamientos con insecticidas anticochinillas, para que sean más eficaces, deben ir dirigidos contra las larvas, que son más sensibles que el adulto.
La Lampranthus es muy utilizada como cobertura en terrenos pobres e inaccesibles en las regiones de clima templado-cálido.
