El género Iresine pertenece a la familia Amaranthaceae y comprende plantas originarias de zonas áridas de la América meridional, de Australia y de las islas Galápagos.
Son plantas perennes siempreverdes, algunas anuales, herbáceas o arbustivas, erguidas o trepadoras, muy estimadas y cultivadas por su característico follaje de color rosa-rojo más o menos cargado que crea una nota de color entre el verde de otras plantas. Las flores son de color blanco o verde, sin ningún valor ornamental y brotan asociadas en inflorescencias en espiga.
Hallamos unas ochenta especies en el género Iresine pero sólo unas pocas son aptas para ser cultivadas en un piso entre las que recordamos:
La Iresine herbstii es la especie que normalmente se cultiva en los pisos, originaria de América meridional.
En maceta es una planta que no supera los 60 cm de altura con los tallos y las hojas de color rojo encendido y con las nervaduras de color rojo más tenue.
Las flores son pequeñas y poco llamativas y raramente se forman en las plantas cultivadas en casa.
Existen numerosos cultivares entre los que recordamos: I. herbstii ‘Aureoreticulata’ planta muy frecuente con hojas verdes manchadas de amarillo y también con las nervaduras amarillas; I. herbstii ‘Brillantissima’ con las hojas rosas - rojo intenso; I. herbstii ‘Wallisi’, cultivar enano con hojas pequeñas de color rojo jaspeadas de negro.
La Iresine lindenii, es una especie perenne, erguida y matosa, originaria del Ecuador, es una planta caracterizada por hojas de forma lanceolada, de color rojo muy encendido y con las nervaduras de color rojo aún más vivo.
El cultivar Iresine lindenii ‘Formosa’ con hojas amarillas y nervaduras rojas está muy extendido.
La Iresine es una planta muy fácil de cultivar y no solicita tratamientos o cuidados particulares.
No tienen ningún problema en adaptarse a las condiciones en las que son cultivadas. Las temperaturas mínimas no tienen que bajar de los 9-10°C y no tienen grandes problemas con las máximas.
Quieren la luz y el aire pero atención a las corrientes de aire frío que podrían hacer morir a la planta. También pueden estar a la luz directa del sol y una buena iluminación es indispensable para garantizar la coloración rojiza de las hojas.
En las regiones de climas templados pueden ser cultivadas también al exterior, formando setos y para dar un toque de color al jardín.
Las Iresine son plantas que deben ser regadas abundantemente y el terreno debe quedar constantemente húmedo durante todo el período primavera-verano mientras durante los demás períodos se riega lo justo para mantener el sustrato ligeramente húmedo.
Hace falta tener cuidado con dejar estancamientos en el fondo maceta que no toleran.
Durante los períodos más cálidos es bueno pulverizar las hojas con agua tibia.
El trasplante se realiza cada año al principio de la primavera en macetas de dimensiones ligeramente más grandes que la precedente. Se utiliza un compost formado a partes iguales de turba, tierra fértil, arena gruesa y mantillo de hojas.
El abonado de la planta debe ser efectuado cada dos-tres semanas durante todo el período primavera - verano diluyendo el fertilizante en el agua de riego.
En lo que concierne al tipo a suministrar, un abono que además de contener macroelementos cuál nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K), contenga también microelementos como el magnesio (Mg), el hierro (Fe), el manganeso (Mn), el cobre (Cu), el cinc (Zn), el boro (B), el molibdeno (Mo), todos importantes para la planta.
Es importante disminuir las dosis con respecto de lo indicado en la etiqueta porque siempre son exageradas.
Florece durante el período veraniego pero no es frecuente que florezca en piso y en todo caso las flores son muy poco decorativas.
Son plantas que no tienen necesidad de auténticas podas si no es de los ápices vegetativos que deben hacerse aproximadamente cada dos meses para estimular la Iresine a ramificarse y por lo tanto a asumir un aspecto más matoso y compacto.
La multiplicación ocurre por esqueje.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
Al principio de la primavera se pueden retirar esquejes de 10-15 cm de los ápices de los brotes jóvenes de la Iresine. Los esquejes se cortan justo bajo un nudo, con un corte oblicuo para tener una mayor superficie de enraizamiento y evitar la acumulación de agua sobre la superficie. Se eliminan las hojas situadas más abajo.
Espolvoree la parte cortada con un polvo que favorezca el enraizamiento y luego se instala en una maceta que contenga turba y arena a partes iguales. Se humedece abundante y uniformemente y se cierra con una bolsita de plástico transparente a modo de capucha teniendo cuidado de que ninguna parte de la planta quede en contacto con el plástico (ayúdese de palitos).
La maceta se posiciona en una zona donde la temperatura sea de alrededor de 21-24°C y no excesivamente iluminada. Cada día se apartará el plástico para controlar la humedad de la tierra y eliminar del plástico el agua de condensación. La tierra siempre debe ser mantenida ligeramente húmeda (regar siempre sin mojar los esquejes con agua a temperatura ambiente).
Los esquejes arraigan en unas 2-3 semanas y nos damos cuenta de ello porque iniciarán a formarse brotes. Entonces se aparta definitivamente el plástico y se tratan las plantas como si fueran adultas.
Éste es el clásico timbre de alarma que nos indica que los riegos son insuficientes.
Remedio: aumentar los riegos tal como indicado en el párrafo "Riego".
Si se manifiesta este síntoma quiere decir que la luz es insuficiente.
Remedio: desplazar la planta a una posición mucho más luminosa.
Pequeños insectos móviles de color variable del blanco al amarillo o al verde son indudablemente áfidos más a menudo llamados pulgones. Son insectos que si no se mantuvieran bajo control pueden provocar graves daños a la planta. Obsérvelos con una lupa y compare con la foto de al lado, son inconfundibles, no puede equivocarse.
Remedio: tratar con productos específicos contra los áfidos.
La especie Iresine herbstii también se llama beefsteak plant o bien «planta bistec». Dado el color rojo de sus hojas, también son llamadas hojas de sangre.
