Los Leptospermum son preciosos matorrales, que se encuentran frecuentemente a lo largo de nuestras costas, muy decorativos.
El género Leptospermum de la gran familia Myrtaceae comprende numerosas especies de plantas siempreverdes de porte arbustivo particularmente indicadas para su cultivo en las zonas costeras. Son plantas originarias de Australia, de Nueva Zelanda y del sureste asiático (y más precisamente de la península malaya, de la isla de Sumatra, de Borneo, de la isla de Java, de las Filipinas, del Sulawesi, de Tailandia, de las Molucas, de Birmania meridional y de Nueva Guinea).
Son matorrales de pequeñas y medianas dimensiones que predominantemente se encuentran a lo largo de las costas pero también en las zonas húmedas, sobre tierras ácidas y sobre terrenos pobres. Son plantas muy extendidas para jardín y decorativas gracias a sus grandes flores, de hasta 3 cm de diámetro, y gracias a su resistencia a muchas situaciones pedoclimáticas (de suelo y de clima).
Las hojas del Leptospermum son alternas, de un bonito color verde intenso y ricas en aceites esenciales, como muchos otros miembros de la familia de las Myrtaceae, en efecto si se aplastan las hojas entre los dedos se huele una intensa fragancia.
Las flores son solitarias o a lo sumo asociadas en grupos de dos, en la extremidad de las ramas, caracterizadas por cinco pétalos y todas un óptimo manantial de polen para la producción de excelente miel.
Existen muchas especies en el género Leptosperumum de los que la mayor parte son endémicas de Australia. Las más extendidas como plantas ornamentales son:
La especie Leptospermum scoparium (foto debajo) es originaria de Nueva Zelanda y de Australia y está caracterizada por un porte arbustivo, con plantas que alcanzan los 5 m de altura. Las hojas son lanceoladas de color verde intenso y las flores son muy llamativas, de hasta 2,5 cm de ancho. Florece al principio del verano, mayo-junio, produciendo numerosas flores individuales o dobles, de color blanco, rosa, rojo o más o menos variegadas según la variedad.
La planta también es llamada árbol de té porque sus hojas dan un óptimo sustitutivo de las hojas del té.
La especie Leptospermum flavescens, sinónimo Leptospermum polygalifolium (foto debajo), originaria de Tasmania y de Australia es un matorral de hasta 5 metros de alto que produce numerosas flores solitarias, de cinco pétalos, de color blanco.
La especie Leptospermum macrocarpum tiene las flores más grandes del género.
La especie Leptospermum petersonii es considerada el "árbol del té de aroma de limón" porque sus hojas tienen un aroma muy parecido al de la lima, tanto que las hojas se usan para dar sabor de limón al té.
Los Leptospermum son plantas fáciles de cultivar y no solicitan cuidados particulares. Son típicamente plantas de jardín. Quieren exposiciones soleadas y en zonas donde durante la estación invernal las temperaturas se hunden sensiblemente, es necesario cultivarlas en posiciones protegidas, por ejemplo al amparo de un muro expuesto al sur y proteger luego las plantas del hielo, por ejemplo con paja que cubra toda la planta, durante la estación invernal.
Los riegos tienen que ser regulares sin dejar encharcamientos en el terreno que no toleran.
Los Leptospermum no son particularmente exigentes en terreno, lo importante es que sean terrenos ligeros, bien drenados pero que mantengan cierta humedad.
El empleo de un abono de cesión lenta después de la floración generalmente es suficiente para dar un buen abonado para toda la estación vegetativa.
Es oportuno usar un abono que además de contener macroelementos como nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), contenga también microelementos como el hierro (Fe), el manganeso (Mn), el cobre (Cu), el cinc (Zn), el boro (B), el molibdeno (Mo), todos importantes para un correcto crecimiento de la planta.
Es oportuno después de la floración retirar las ramas de Leptospermum que se han estropeado o que crecen de modo desordenado.
Tenga cuidado de que el utensilio que use para el corte esté limpio y desinfectado, preferiblemente a la llama, para evitar infectar los tejidos.
La época de floración, para la mayor parte de las especies, es la primavera - principio de verano.
La multiplicación del Leptospermum ocurre por semilla o por esqueje.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
Se retiran esquejes de 7-10 cm de largo al principio del verano (junio-julio), todavía no lignificados.
Los esquejes deben ser cortados justo bajo un nudo con un corte oblicuo porque eso permite de tener una mayor superficie de enraizamiento y evita la acumulación de agua sobre esta superficie.
Utilice un cuchillo afilado para evitar que se deshilache el tejido, limpio y desinfectado (de preferencia a la llama o con alcohol o lejía) para evitar infectar los tejidos.
Se eliminan las hojas más bajas y se espolvorea la parte cortada con hormonas de enraizamiento y se instalan en un compost formado por una parte de turba y una de arena gruesa haciendo agujeros con un lápiz, tantos como esquejes, teniendo luego cuidado de compactar delicadamente el sustrato.
Las macetas se instalan en una zona donde las temperaturas estén alrededor de los 16°C y se mantiene el terreno siempre húmedo.
Cuando empiecen a aparecer los primeros brotes, quiere decir que en los cortes se han formado raíces. Entonces se espera a que los esquejes se robustezcan. Cuando sean lo suficientemente grandes, se establecen en macetas de cerca de 8 cm de diámetro con un compost formado por dos partes de sustrato de jardín, una de turba y una de arena y se hacen invernar al amparo del frío en un lugar protegido.
Las plantas estarán listas para ser trasplantadas al jardín después de haberlas cultivado durante un año en entorno protegido, plantándolas al principio de la primavera.
Este síntoma es típico de la Phytophthora spp. un hongo muy dañino. Con el pasar del tiempo las áreas marcescentes se extienden a toda la planta. Se manifiesta sobre todo en zonas donde los veranos han tenido un transcurso caliente y muy húmedo.
Remedio: la lucha contra este hongo se basa, además de sobre una reducción de la humedad ambiental, gracias al que este hongo se multiplica, también con el tratamiento con fungicidas específicos después de haber eliminado todas las partes dañadas.
Las manchas sobre el envés de las hojas podrían significar cochinilla algodonosa. Para estar seguros, sugerimos utilizar una lupa y observar. Se caracterizan por tener una especie de escudo protector, de color blanco algodonoso. Además si intenta sacarlas con una uña, salen fuera fácilmente. Son los parásitos más frecuentes que atacan a estas plantas.
Remedio: hace falta usar antiparasitarios específicos, en particular aceite blanco, localizable en un buen vivero.
Si hay pequeños insectos móviles está indudablemente en presencia de áfidos comúnmente llamados pulgones. Son insectos que si no se mantuvieran bajo control pueden provocar graves daños a la planta.
Remedio: tratar con productos específicos contra los áfidos localizables en tiendas especializadas en jardinería. Se trata generalmente de productos sistémicos, es decir que entran en el círcuito linfático de la planta y por lo tanto son absorbidos durante la nutrición de los insectos.
El nombre Leptospermum deriva del griego leptos «fin, sutil» y esperma «semilla» para indicar su semilla sutil.
