El género Celosía pertenece a la familia Amaranthaceae y comprende plantas muy estimadas por sus inflorescencias muy llamativas, coloreadas y llamativas que se yerguen por encima de las hojas. Pero no sólo, porque muchas especies son comestibles y se usan las hojas como alimento.
Son plantas anuales originarias de zonas tropicales de Asia, de África y de América.
Existen unas 50 especies en el género Celosía entre las que recordamos:
La Celosía argentea es la especie de la que derivan todas las demás, originaria de Asia tropical. Es una planta que alcanza una altura de un metro con hojas de color verde oscuro, rudas, con evidentes nervaduras. Las flores son de color blanco argentado. Son interesantes las innumerables variedades que derivan de esta especie:
La Celosía argentea var. argentea o «espinaca de Lagos», es una planta con hojas comestibles muy cultivada en diversos países como México, dónde se llama comúnmente flor de terciopelo; en Nigeria (y en toda África occidental) es conocida como soko yokoto «haz a tu marido gordo y feliz»; en España, Italia y Guatemala se llama cresta de gallo. Es una planta que se usa como alimento tradicional en África occidental y en el sudeste de Asia donde se comen tanto las hojas como las flores.
Las flores de esta especie a menudo se secan y guardan porque mantienen mucho tiempo su color.
En la Celosía caracas las inflorescencias, típicas de la especie, se forman por numerosas flores de color carmesí. La floración ocurre durante el período veraniego.
Las Celosía son plantas que quieren la luz, el sol y el calor. Las temperaturas óptimas de cultivo están alrededor de los 20-23°C para conseguir una abundante floración y la exposición a pleno sol si se cultiva al exterior. Dentro de casa, vale la misma regla pero atención a que la planta no reciba los rayos del sol filtrados por el vidrio (durante la estación más cálida) porque al funcionar como lente, podrían quemar la planta. Temperaturas inferiores a 15°C empiezan a crear problemas a la planta.
En las regiones de clima templado es una planta que puede ser también cultivada con éxito al exterior para adornar bancales y jardines.
Atención a no dejar encharcamientos en el posamacetas porque crearían un entorno asfixiante para las raíces de la planta que no toleran en modo alguno.
En consideración al hecho de que es una planta de origen tropical, quieren los entornos húmedos, por lo tanto es oportuno, durante la estación cálida, hacer frecuentes nebulizaciones en la copa, teniendo cuidado de no mojar las flores sino sólo las hojas. Es preferible que las nebulizaciones a la copa se hagan pronto por la mañana de modo que por la tarde todas las partes de la planta estén bien secas.
No es necesario efectuar el trasplante de la Celosía en consideración al hecho de que son plantas que son cultivadas como anuales, por lo que en el momento del trasplante de las plantas conseguidas de semilla, use una mezcla formada por un buen terreno fértil, turba y arena gruesa. El pH óptimo tiene que estar alrededor de 6-6,4.
Se inician los abonos de las plantas a partir del mes de mayo usando un buen fertilizante líquido diluido en el agua de riego una vez el mes. Cuando la planta empieza a florecer hace falta abonar con mayor frecuencia (cada dos semanas), disminuyendo sin embargo ligeramente las dosis con respecto a lo indicado en el producto.
Use un fertilizante que tenga una relación 3:1:2, es decir tres partes de nitrógeno (N), 1 de fósforo (P) y 2 de potasio (K), que favorece una floración más copiosa de la planta.
En las Celosía, en la mayor parte de las especies, la floración se inicia hacia el fin de la primavera y puede continuar hasta el otoño avanzado.
Para conseguir una mayor cantidad de flores hace falta actuar cortando los ápices vegetativos de la planta, lo que favorecerá una mayor ramificación y por lo tanto un mayor número de flores.
Las plantas de Celosía se multiplican por semilla. Con este tipo de propagación es probable que las plantas que consiga no sean iguales a la planta madre porque interviene la variabilidad genética. En este caso, sin embargo, esto podría no ser una desventaja ya que podría tener agradables sorpresas.
MULTIPLICACIÓN POR SEMILLAS
Al principio de la primavera (marzo) disponer las semillas a una profundidad de unos 2 mm en un buen sustrato para semillas. Para ayudarse en esta operación puede usar un trozo de madera plana para enterrar las semillas o bien verter una sutil capa de tierra por encima. La caja así preparada debe colocarse en un entorno donde la temperatura esté constantemente alrededor de 20°C, a sombra parcial y el sustrato debe ser mantenido constantemente húmedo.
Este síntoma es índice o de excesivos riegos o bien de que los abonos no son regulares o de que la planta ha estado sometida a corrientes de aire frío
Remedio: si el sustrato está empapado, controlar las raíces de la planta, eventualmente eliminar las podridas y trasplantar. En el futuro regular mejor los riegos.
En caso de que la causa no sean los riegos, entonces desplace la planta a un lugar más caliente, sin corrientes de aire, y regule mejor los abonos según las indicaciones de la presente ficha.
Generalmente se trata de áfidos, más conocidos como pulgones. Son insectos que si no estuvieran bajo control pueden provocar graves daños a la planta.
Remedio: tratar con productos específicos contra los áfidos localizables en tiendas especializadas en jardinería.
La particularidad de algunas especies del género (en particular la Celosía plumosa), es que las flores pueden ser secadas y mantienen por mucho tiempo su color. Si se desea secarlas hace falta recogerlas en plena madurez y colocarlas en una habitación oscura, bien ventilada y boca abajo. De este modo, en cosa de una semana, estarán secas y podrán ser usadas como decoración. Por experiencia personal aconsejo, una vez secas, rociar un poco de laca para el pelo (o cola en espray) que mantiene más largamente las flores.
El nombre Celosía deriva del griego keleos «ardiente, llameante» por el color de la inflorescencia.