La Aristolochia, además de ser muy utilizada para adornar muros y glorietas, es conocida en la medicina homeopática europea pero sobre todo en la farmacopea china por la cura de muchas patologías. Sus nombres vulgares españoles más conocidos son: aristoloquia, candiles, candilejos.
El género Aristolochia de la familia de las Aristolochiaceae comprende numerosas especies herbáceas o arbustivas, de hoja caduca o perenne. De todas este especies sólo unas pocas son cultivadas con fines ornamentales y todas son trepadoras, utilizadas para adornar las paredes y torres o para enriquecer pérgolas.
La particularidad de estas plantas son las flores que emanan perfumes muy intensos para atraer a los insectos funcionando como auténticas trampas en la mayor parte de las especies ya que los insectos polinizadores, una vez entrados en la corola, resbalan sobre de un revestimiento ceroso que se encuentra dentro del tubo floral que permite entrar pero no salir porque presenta numerosos pelos que actúan de barrera. La misma forma de la flor, tubulosa y con la base hinchada, favorece la captura del insecto. Sólo una vez ocurrida la fecundación y con el marchitamiento de la flor, los insectos prisioneros, bañados de polen, podrán salir e ir a polinizar otra planta.
Existen numerosas especies en el género Aristolochia entre el que recordamos:
La especie Aristolochia macrophylla es una planta trepadora, ideal para adornar pérgolas, de crecimiento rápido. Se caracteriza por sus hojas muy grandes, de hasta 30 cm de ancho, de color verde oscuro con reflejos azulados. Las flores son características, en forma de pipa, de color amarillo-verde en el exterior y rojo oscuro en el interior y muy perfumadas.
La Aristolochia clematitis es originaria de regiones del Mediterráneo, de Asia Menor y del Cáucaso.
La planta posee rizomas reptadores subterráneos perennes a partir de los que cada año se forma la parte aérea. Alcanza la altura de un metro y se caracteriza por un tallo erguido sobre el que se desarrollan las hojas pecioladas, dispuestas de modo alterno, acorazonadas y obtusas en el ápice.
Las flores, típicas del género, tienen forma de pipa, de color amarillo y generalmente se desarrollan en la axila de las hojas en grupos de dos o más. El fruto es una cápsula globosa péndula de cerca de 3 cm de diámetro.
La Aristolochia gigantea es originaria del Brasil, de Colombia y de Panamá. Es una planta trepadora, siempreverde, con los tallos leñosos en la base que alcanzan los 10 m de altura. Las hojas se disponen de manera alterna, de forma ovalada con el ápice puntiagudo y de color verde claro.
Las flores son muy grandes, solitarias, faltas de pétalos, con el cáliz constituido por un tubo hinchado y curvado de color blanco-verdusco, que se extiende y asume la forma de una pipa con la extremidad vertical ampliada y de hasta 20 cm de larga, densamente jaspeada de color orujo. Emanan un perfume no muy agradable.
La Aristolochia elegans, originaria del Brasil, es una planta trepadora que alcanza sin dificultad los tres metros de altura, caracterizada por hojas acorazonadas y flores de 10 cm de ancho, de forma tubular de color amarillo y con las extremidades del tubo floral de color rojo más o menos matizado y con nervaduras blancas. Florece durante el período veraniego (julio - septiembre).
La Aristolochia fangchi se encuentra frecuentemente a lo largo de los arroyos y en los valles. Es una planta perenne, trepadora, caracterizada por un tallo sutil que se desarrolla no más de 5 m de altura. Las hojas son enteras, pecioladas, de forma oblonga. La flor es de color violeta con manchas amarillas. El fruto es una cápsula que contiene en su interior numerosas semillas. Florece de mayo a junio.
Las Aristolochia son plantas de fácil cultivo que solicitan poco y unos simples trucos.
Son plantas que no toleran las bajas temperaturas y no quieren el pleno sol sino posiciones en semisombra.
Desde la primavera y durante todo el verano deben regarse abundantemente mientras que a partir del otoño y durante todo el invierno, los riegos deben reducirse sensiblemente.
No son particularmente exigentes en cuánto a la tierra aunque prefieren sustratos ligeros, ricos en sustancia orgánica y bien drenados, no toleran el encharcamiento.
A partir de la primavera y durante todo el verano deben abonarse usando un fertilizante líquido diluido en el agua de riego cada dos semanas y demediando las dosis con respecto de lo indicado en el producto fertilizante.
Es oportuno usar un abono que además de contener los macroelementos (nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K)), contenga también los microelementos como hierro (Fe), manganeso (Mn), cobre (Cu), cinc (Zn), boro (B), molibdeno (Mo), todos importantes para un correcto crecimiento de la planta.
Es necesaria la poda cuando la planta ha crecido demasiado y tiene necesidad de recortarse. Esta operación puede ser efectuada al final del invierno (febrero) cortando las ramas a un tercio de su largo.
Puesto que son plantas que tienden a desarrollarse más en altura que a lo ancho, para tenerlas más espesas, es oportuno despuntar una o dos veces el año los ápices vegetativos para estimular el crecimiento de las ramas laterales.
Acordarse de utilizar instrumentos de corte que estén limpios y desinfectados (preferiblemente a la llama) para evitar que se conviertan en vehículo de enfermedades parasitarias.
Las Aristolochia se multiplican por semilla o por esqueje.
MULTIPLICACIÓN POR ESQUEJE
En julio se retiran esquejes de unos 10 cm de largo cortándolos por debajo del nudo, de modo que queden algunas hojas y eliminando las de más abajo. Se recomienda cortar en sentido oblicuo ya que eso permite tener una mayor superficie para el enraizamiento y evita la acumulación de agua sobre esta superficie. .
Use una hoja de afeitar o un cuchillo afilado para evitar el deshilachado de los tejidos y tenga cuidado de que el utensilio que use para el corte esté limpio y desinfectado (preferiblemente a la llama) para evitar infectar los tejidos.
Después de haber sumergido la parte cortada en un polvo para favorecer el enraizamiento, se instalan los esquejes en un sustrato formado por turba y arena a partes iguales, haciendo agujeros con un lápiz, tantos como esquejes que plantar teniendo a continuación cuidado de compactar delicadamente el mantillo.
La maceta se instala en una zona de la casa donde la temperatura esté alrededor de los 18°C y cada día hará falta controlar el terreno que tiene siempre que quedar húmedo. Desde que empiecen a aparecer los primeros brotes, los esquejes habrán arraigado. Entonces se espera a que los esquejes se robustezcan y cuando sean suficientemente grandes, se establecen en la maceta definitiva y se tratan como las plantas adultas.
No están particularmente sometidas a enfermedades o a ataques parasitarios.
Muchas especies del género figuran en la farmacopea de la República Popular China:
El nombre del género deriva del griego αριστος (aristos) «óptimo» e λοχεία (lochèia) «parto» porque en tiempos antiguos se utilizaron muchas especies para favorecer el parto y en la prevención de infecciones.
Notas
1. Emenagogo: capaz de estimular el aflujo de sangre en el área pélvica y en el útero
2. Galactógeno: que intensifica la producción de leche en las glándulas mamarias
3. Artralgia: dolor de una articulación
4. Vulnerario: que tiene acción cicatrizante sobre las heridas y sobre las llagas